Soy muy cabezona, no me gusta que me lleven la contraria pero cuando me equivoco sé reconocerlo, aunque también soy muy cariñosa y se ganan mi confianza rápidamente....esa es una de las razones por las que siempre me llevo tantas decepciones, porque cuando me encariño y creo que lo tengo todo es cuando algo me  falla, se olvidan de mí y me dejan de lado;
A veces intento entablar una conversación y todo va perfecto pero al día siguiente parece que no ha pasado nada y eso llega a un punto en el que me cansa , así que paso de ir arrastrándome tanto por mantener una amistad que sé que tarde o temprano  acabará. Y es que me preocupo tanto por los problemas de los demás que a veces olvido que yo también los tengo y no se solucionan solos pero claro ahí no hay nadie que se preocupe por mí así que como bien dice el refrán mejor sola que mal acompañada.